En el caso de los navegadores web, es un conjunto de datos que almacenan de una web para que cuando lleguen futuras peticiones de esa información esta no tenga que volver a descargarse. Esto ayuda a reducir la cantidad de información que tiene que descargar un usuario, la velocidad que tarda en cargar una web y las peticiones que se realizan al servidor. Un ejemplo de elementos que se almacenan en cache son por ejemplo las imágenes o los códigos que permiten que la web se muestre y funcione como debe.